No saben el tamaño de la sonrisa que tengo en la cara al
verme escribiéndoles de nuevo. Son muchos los porqués de mi silencio, pero
no lloremos por le agua derramada. La buena noticia es que
ya estoy de vuelta y quiero hacerles un resumen de lo que fue Proyecto63 en el
2014.
Antes de comenzar con el anecdotario, quiero extender mis
brazos a través del computador y darles un gran abrazo de bienvenida y agradecer a quienes han estado en contacto
conmigo queriendo saber qué fue de mi.
Me siento muy agradecida y afortunada por cada uno de mis lectores y compañeros
de lucha en esto.
2014 fue un año… particular, en lo personal y
profesional. Explicarlo detalladamente
sería intimar demasiado (no me es cómodo, espero comprendan), la buena noticia
es que a pesar de suspender las rutinas de ejercicio y haber dejado de contar calorías,
pude mantenerme en el mismo peso (voy y vengo entre los 75 y los 78 kilos) creo
que el éxito de esto es que como trabajé mucho para desarrollar nuevos
hábitos, la mayoría se quedaron conmigo a pesar de todo: el primero y al que le
debo más es al de control de porciones, muchas dietas/regímenes alimenticios
coinciden en este punto y creo que están en lo correcto, por más que el menú no
fuese el mas saludable jamás volvieron aquellos (varios) platos con porciones
excesivas, claro que puedo recordar
alguna indulgencia pero fueron muy pocas y las recuerdo bien porque no me
cayeron nada bien, mi cuerpo las resintió muchísimo, lo cual también me hacia concientemente
reducir las cantidades. Otro lado amable
de este bache, por asi decirlo, es que como ya conocí la alimentación
saludable, se muy bien como un cuerpo sano, nutrido y bien alimentado se
siente, vamos que tampoco soy una adonis, pero en comparación con mi punto
inicial (y si han leído algunos e mis post pasados) es como si tuviera otro
cuerpo, no dejo de resaltar la energía que desarrollé, la fuerza, tenía más
ideas, hacía y quería hacer más cosas,
mis niveles de estrés bajaron, estaba despierta y alerta todo el tiempo, me
despertaba con una alegría inexplicable…
por lo que haber bajado la calidad de alimentación me hizo perder parte
de todos estos beneficios y por eso estoy aquí, porque los quiero de vuelta. En
el 2014 pude poner en práctica todo lo que había leído de los malestares que
causan los excesos de carbohidratos y de proteína animal, me enriqueció y me dio
mayor conocimiento en la materia.
Hablemos del presente. Mis metas han cambiado… o algo así,
bueno, cambiado no, evolucionado. No
necesariamente mis motivos, maneras y metas sean las correctas para os demás, o las mejores,
el camino de todos es distinto, las prioridades son distintas, las metas no son
las mismas, y dentro de este espacio planteo y registro mis camino personal, lo
que la experiencia me ha dado y lo que se siente correcto para mi bienestar.
Los invito a que tomen información en inspiración de distintas
fuentes/corrientes con el menor prejuicio, experimenten, sean curiosos, junto con eso obsérvense, escuchen su cuerpo y
no tengan miedo a replantearse ideas que
creían inamovibles. El cambio es vida.
Las primeras metas fueron cumplidas, no tengo una obesidad
que me impide hacer cosas, ya no hay dolores de cabeza, o paso tardes
durmiendo, el miedo a entrar a una
tienda y no encontrar ropa de mi talla o ser maltratada por las dependientas y
su frase prefabricada de “para ti no tenemos nada” desapareció, ahora manejo
este curioso evento de ver como la atracción de los hombres hacia mi aumentó (este
es un tema que quiero tratar a parte, es un asunto sensible a mi juicio y
quiero desarrollarlo lo mejor que pueda y que lo hablemos juntos). Haberme
liberado de muchas cosas me lleva a plantearme nuevos caminos, un punto específico
es que me gustaría eliminar la ingesta de proteína animal, he visto y sentido
como mi cuerpo reacciona mucho (pero mucho) mejor cuando lo alimento con proteínas
vegetales. Estoy trabajando en platos que impliquen poca preparación, mientras más natural sea el estado de los
alimentos, más simples y puros sean los sabores, mejor me siento, para explicarlo
mejor, un puñado de lentejas en una olla con agua, un poco de sal y pimienta es
uno de mis grandes placeres, el sabor
primario y natural del grano es genial, o una gran bol con vegetales crudos
picados con un aderezo de pocos ingredientes, naturales y exóticos puede ser
muy emocionante. Soy creyente de más
simple, mejor.
Creo que dejaré esto hasta aquí por hoy. Estaré por acá
seguido y me gustaría que me ayudaran a elegir los próximos temas a desarrollar
¿hay algo de lo que quieran que escriba en especifico? Vengo preparando algunos post con recetitas
fáciles y económicas, espero les sean de ayuda.
Abrazos, chicos.
0 comentarios:
Publicar un comentario